miércoles, 15 de septiembre de 2010

Publicidad de mal gusto

Estoy a favor de las comparaciones, de la información y de las campañas de advertencia a los consumidores. Pero hay algo que no soporto y es la publicidad ya "mascada" que apunta con el dedo al enemigo. No estamos aquí para señalar al culpable de un problema, en este caso la obesidad, si no para informar y persuadir al consumidor sobre los riesgos de la comida rápida.
No sé como el lobby Physicians Committee for Responsible Medicine ha aceptado esta película, pero sin duda les traerá consecuencias.



Una vez visto el vídeo yo me pregunto: "¿Es acaso McDonalds y solo McDonals el causante de la obesidad en USA? ¿No hay más restaurantes, cafés y puestos de comida rápida? ¿Cómo pretenden educar a una sociedad en la que la concienciación se sustituye por la acusación?

Creo que por anuncios así la publicidad pierde prestigio. No digo que sea la ciencia más perfecta, pero sin duda no debería usarse como herramienta para una guerra sucia entre lobbys y empresas.

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